Aprovechando su ingreso al Cabildo de Othón P. Blanco como regidor suplente, el empresario y dirigente local del Partido del Trabajo, Sergio Zapata Vales, ha volcado toda su atención en conseguir, a como dé lugar, los permisos necesarios para poder operar y distribuir una red de agua purificada en varias zonas de Chetumal y del poblado de Calderitas. De esta manera hizo un pacto con el actual edil morenista, Othoniel Gómez Segovia, para la obtención de los mismos a cambio de acusar a tres funcionarios -que no son fines al alcalde- de intentar extorsionarlos. Su estrategia no prosperó, pero reveló sus verdaderas intenciones: conseguir las concesiones en los 11 Municipios para crear un monopolio de distribución y venta de agua purificada que pueda vender finalmente al mejor postor. Y ya casi tiene la mitad de ellas.
Javier Ramírez
Apenas tomó cargo como regidor (en suplencia de Manuel Valencia Cardín), el empresario Sergio Zapata revivió su interés por obtener los permisos necesarios para distribuir agua purificada directamente a los hogares del norte de Chetumal, por medio de su empresa “Más Allá de tus Expectativas”, envolviéndose incluso en un escándalo al afirmar que el Gobierno municipal de Othón P. Blanco está condicionando la aprobación de los mismos a cambio de su voto en el Cabildo e incluso “cooperación en efectivo”.
Pero lo cierto es que su intención va más allá de vender agua apta para el consumo humano en una región de la ciudad: desde 2013 el empresario ha realizado acciones similares en otros Municipios del Estado, logrando su objetivo en Isla Mujeres, Benito Juárez, Tulum, José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto, aunque en ningún de ellos ha invertido un solo peso para comenzar a operar.
Entonces, ¿cuál podría ser la obsesión de Sergio Zapata para obtener una concesión que no va a utilizar? La respuesta la dieron en su momento miembros de la administración municipal anterior: el verdadero objetivo de Sergio Zapata es monopolizar a través de su empresa los permisos de distribución y venta de agua purificada en todo Quintana Roo, para después venderlo al inversionista que haga la mejor oferta.
Una añeja obsesión
Desde 2012, el empresario y ahora regidor, Sergio Zapata Vales, ha intentado obtener los permisos necesarios para aprovechar el agua subterránea, al purificarla y distribuirla hasta hogares, restaurantes y comercios, iniciando en los fraccionamientos Andara y La Conquista (de los cuales es propietario), así como en la población de Calderitas.
Sin embargo, hasta el momento cada administración se lo ha negado, con el argumento de que las leyes de Desarrollo Urbano Municipal y de Aprovechamiento de Aguas permiten el aprovechamiento del vital líquido únicamente por medio de la excavación, pero prohíben la canalización.
En otras palabras, si una persona quisiera vender agua purificada, puede perforar un pozo, tratarla, y en el punto donde realizó la excavación, venderla; tal como lo hacen algunos locales de venta de agua purificada.
Pero introducir tubería en los fraccionamientos y colonias del Municipio othonense es una facultad que hasta ahora corresponde únicamente a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), por lo que la petición del empresario es ilegal.
Sin embargo, esto no ha frenado a Zapata Vales, quien desde entonces ha interpuesto más de 12 denuncias en contra de funcionarios de diferentes gobiernos del municipio capitalino, así como de CAPA, por negarse a su solicitud.
En 2018, Sergio Zapata Vales denunció penalmente ante la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción a cuatro funcionarios del Ayuntamiento de Othón P. Blanco y a uno del Gobierno del Estado, por “coartar la inversión privada” al negarse a emitir los permisos requeridos para la instalación de una empresa con el fin de dotar de agua purificada por medio de una red domiciliaria.
La demanda presentada la tarde del pasado lunes 27 de mayo quedó asentada en la carpeta de investigación FGE/QR/OPB/02/872/2018, por los delitos de coalición indebida, negligencia en el desempeño de sus funciones, aprovechamiento ilícito del poder, abuso de autoridad y lo que resulte.
Pero también ha interpuesto denuncias en contra de las anteriores administraciones municipales de Bacalar y Solidaridad, porque también rechazaron su intento por distribuir agua purificada.
La búsqueda del monopolio
Incluso, uno de los argumentos utilizados por Zapata Vales es que ya ha logrado obtener autorizaciones en los Municipios de José María Morelos, Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Isla Mujeres y Benito Juárez.
Por tanto, sólo faltarían Othón P. Blanco, Cozumel, Bacalar, Solidaridad, Lázaro Cárdenas y Puerto Morelos para que prácticamente tenga el monopolio de la distribución del agua purificada en todo el Estado, lo cual ninguna otra empresa ha logrado.
“Yo no busco privatizar el agua potable, es una red distinta, es una instalación diferente a la red pública, es una red privada y los que se quieran conectarse podrán hacerlo y quienes no quieran, pues no están obligados a conectarse a la red para tener agua purificada en sus hogares”.
“Nosotros tenemos concesiones federales para explotar el manto acuífero del país, estamos supervisados y verificados por ciertos lineamientos que cumplen la norma 201 que es la de agua purificada, es un producto muy distinto a la del agua potable. Nosotros buscamos beneficiar a la gente con agua purificada para beber humanamente a un bajo costo y con un servicio de calidad y superior que combate el problema del PET, que son productos contaminantes”, dice el empresario.
Carlos Díaz, funcionario de CAPA y que ha tenido relación con el caso al formar parte del área jurídica de la dependencia, explica que la obsesión del empresario tiene más bien la intención de acaparar las concesiones en cada Municipio del Estado, para así ofrecerla por medio de su empresa a cualquier empresario, incluidos extranjeros, lo que significaría la puerta abierta a un monopolio de la distribución del agua potable en Chetumal.
“Porque tan sólo llevar instalar toda la infraestructura para distribuir agua potable en una colonia se necesita una inversión de al menos 50 millones de pesos. Imagina lo que necesitaría invertirse para hacerlo en todo el Estado. No dudo que puede hacerlo, aunque no es tan viable en el corto o mediano plazo. Por eso tenemos conocimiento de que su intención es ofrecer este servicio a inversionistas, para que sean ellos quienes realicen la inversión, añadiéndolos como socios a su empresa. Sería el inicio de un gran monopolio en el Estado”, puntualiza.
En los días pasados se afirmó que el presidente municipal de Othón P. Blanco, Othoniel Segovia, había pactado un permiso para que la empresa “Más Allá de tus Expectativas”, pueda comenzar a instalar tuberías de agua hacia diferentes zonas de la ciudad.
A cambio, el recién nombrado regidor tendría que “armar un escándalo” en el Cabildo, acusando al secretario general, al contralor y al tesorero municipal, de intentar extorsionarlo para conseguir los permisos, funcionarios que no son afines al presidente municipal.
Y así sucedió: en la pasada Sesión de Cabildo, Sergio Zapata presentó un video en el que supuestamente evidenciaba estos hechos, y casi de inmediato surgieron los rumores de que serían destituidos; aunque dicho material fue rechazado como prueba al encontrarse editado y con baja calidad de audio.
Además, se reveló por medio de un oficio del día 6 de mayo de este año (casi tres semanas antes de la supuesta extorsión), que el alcalde othonense otorgaba a Sergio Zapata la posibilidad de comenzar con los trabajos de explotación del agua.
Sin embargo, dicho documento no tiene efecto, ya que la facultad del presidente municipal no puede contrariar las leyes municipales, y éstas evitan, tal como se mencionó con anterioridad, la canalización para poder distribuir el agua purificada en las colonias.
FUENTE: estosdias
