Código capital

¡El junior de papi! –Ángel Ramírez 

¡Vergüenza! Elías Antonio Prado Laguardia, maratonista improvisado como Subsecretario de Gobierno de Quintana Roo, encargado en la entidad del mecanismo federal de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, fue pillado inhibiendo la acción de los guardianes del orden. Prado Laguardia que nada ha hecho por proteger a los periodistas, es más ni nos conoce, arremetió contra policías municipales de Bacalar, cuando estos le prohibieron atracar su embarcaciónen zona prohibida de la laguna de los 7 colores. El subsecretario de gobierno, presuntamente pasado de copas, gritando a los guardianes del orden, les aseguró serian corridos de sus funciones, sólo por cumplir la ley. Laguardia Prado andaba, dicen, de parranda con los cuates y quiso tirar ancla en un área protegida. Si él está para proteger a grupos vulnerables, en funciones de defensa ciudadana, y no actúa como autoridad, entonces cómo dice el “Chapulín Colorado”, ¿Quién podrá defendernos?

Destituciones por uniformes, confirmadas. – JulianSantiesteban.

El director general de Administración de la Oficialía Mayor, Manuel González Zapata, el primer funcionario de este sexenio, nombrado incluso al final del gobierno de Roberto Borge Angulo, ha caídoFue separado del cargo, hasta ahora por 15 días; y al director de Recursos Materiales de esa instancia, Edwin Díaz Tello, lo inhabilitaron ya por seis meses. ¿El motivo? Irregularidades en la asignación de un contrato para elaboración de uniformes escolares a la empresa poblana Adicón S.A. de C.V.

Se había adelantado como rumor, confirmado hoy por el titular del área, Manuel Alamilla Ceballos, quien acotó que ambos llevan aun procesos abiertos ante la Secretaría de la Contraloría Estatal (Secoes), pero el asunto es de la mayor relevancia, pues confirma lo que siempre se negó, es decir, que hubo irregularidades en asignar a empresas foráneas un trabajo que en los dos años subsecuentes han realizado negocios locales.

El asunto debiera mejorar la imagen de la administración, pues se demuestra voluntad para corregir lo mal hecho, pero obliga además a investigar la gestión del suspendido y el destituido, como una manera de mostrar a los quintanarroenses lo que este gobierno ha asumido como lema: “En Quintana Roo, el que la hace la paga”; a menos que al final regresen a trabajar como si nada. La palabra la tiene ahora la Secoes. Seguiremos informando.

Derechos indígenas entre gritos y sombrerazos. –Graciela Machuca Martínez

La noche del 15 de septiembre de 2019 en el zócalo de la Ciudad de México, sede de los Tres Poderes de la Unión, Andrés Manuel López Obrador, reivindicó en su discurso, con un ¡Viva! a los pueblos indígenas del país, que lo compromete como jefe de Estado a ser congruente y llevar sus pensamientos a la práctica. La estrategia política está en marcha, porque en los próximos días realizará un recorrido por el país para visitar a esos pueblos indígenas a los que mencionó la Noche del Grito por la Independencia de México. Sin embargo, la lectura política y económica debe ir más allá de la forma de pensar del presidente de la República, porque tiene la encomienda de respetar los derechos indígenas, a pesar de las inversiones del Tren Maya y del Corredor Transístmico. A los pueblos indígenas solo les queda defenderse a sombrerazos, porque el presidente ya gritó y dijo la última palabra: los megaproyectos van.

Ocultar la realidad para no molestar al Príncipe. –Victoriano Robles Cruz.

Obviamente tiene su costo no permitir la trascendencia de la verdad. Las genuinas protestas de los afectados por el gobierno actual, manifestadas el domingo y lunes pasado, en el momento del grito de independencia y en el desfile, tuvo su costo adicional, no sólo político sino económico, para evitar que la mayoría de los medios de comunicación, llevaran la noticia para todos los quintanarroenses. ¿Por qué la obcecación para ocultar la verdad de los hechos en eventos trascendentales?

En un ámbito de corrupción y ausencia de transparencia suena lógico la habituada manera de ocultar los hechos reales. Debemos preguntarnos: ¿Tan grave es el miedo a la realidad como para apropiarse de las conductas engañosas? También esa conducta pretende corromper a nuestra sociedad. ¡El hartazgo no se puede ocultar!

Es una perversión, quienes así actúan conocen bien los hechos y pretenden vestirlos con un disfraz hipócrita, premeditado y conscientemente, para conseguir las adhesiones de tibios, superficiales, ignorantes o farsantes, vamos, para no molestar a nadie, mucho menos al Príncipe.

PD.- Millonario robo en Santander Chetumal, más de 3 millones de pesos. ¡Otro de los resultados del cambio!

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