Ante la fuerte problemática que se ha desatado a raíz del cambio de esquema en el programa de Etancias Infantiles, Rosalba Valencia Cruz, diputada de Morena, denunció que, la ex delegada de Sedesol y actual diputada del PRI, Anilú Ingram Vallines posee en Veracruz 15 estancias infantiles, muchas con niños ‘fantasma’.
La red de corrupción se fraguó entre los delegados y subdelegados de Sedesol, que se hicieron de permisos para estancias utilizando prestanombres y familiares de la priista.
Por el caso de las estancias infantiles, existen 4 denuncias penales en contra de ex colaboradores de Ingram Vallines.
Se detectó en algunas estancias infantiles que sólo tenían sólo 4 niños y cobraban el subsidio por el número máximo de niños, por lo que se están armando las carpetas en la investigación para que la instancia correspondiente ponga la denuncia.
Valencia Cruz acusó a Anilú Ingram, de estar involucrada en actos de corrupción en guarderías de Veracruz durante su desempeño como delegada de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
En entrevista para Revolución TRESPUNTOCERO, Rosalba Valencia, habló al respecto:
“En 15 estancias infantiles, los dueños estaban relacionados con la diputada Ingram Vallines, además de que muchas de ellas contaban con niños fantasmas. Eran propiedad de personas cercanas a ellas y no cubrían los lineamientos de Protección Civil.
“Muchos delegados y subdelegados, tiene prestanombres en las estancias infantiles, con el disfraz de la buena voluntad han estado lucrando con este programa, de apoyo a los niños”.
Valencia, explicó que los abusos cometidos en este ámbito no solo radican en la complicidad de políticos para su enriquecimiento, sino que han promovido Estancias que dejan fuera a las personas de escasos recursos.
“Las Estancias fueron pensadas en primer lugar para atender a niños de escasos recursos, hijos de madres y padres trabajadores que no cuentan con ninguna prestación social. Tristemente nos hemos encontrado que la mayoría de ellas se encuentran ubicadas en lugares de un nivel económico más alto, clase media-alta en su mayoría.
“En los lugares de escasos recursos, que es donde más se necesitaban, es en donde menos hay”, denunció.
Hay Estancias Infantiles que cumplen la documentación obligatoria, enfatizó, lo que deja claro un proceso de complicidad de las autoridades para entregar concesiones sin disimulo.
“Lo preocupante es que se está poniendo en riesgo la vida y la integridad de los niños, no es justo que se esté lucrando a costa de los más pobres, ni de nuestros niños.
“No hay coincidencias, no es posible que el DIF tenga unas cifras y la Sedesol otras. Ahora que estamos revisando las condiciones en las que se encentraba el programa nos damos cuenta que las autoridades de sexenios pasado solapaban y promovían la corrupción”, señaló.
De acuerdo con declaraciones oficiales, de las poco más de 9 mil estancias, 6 mil 966 resultaron con focos rojos en sus evaluaciones, además se detectaron sobre costos, sobornos, capacitaciones deficientes, entre otros problemas que originaron su cambio de esquema.