Con una tasa de 111.33 homicidios por cada 100 mil habitantes, en 2017 la mexicana Los Cabos fue la ciudad más violenta del mundo e ingresó por primera vez al ranking.
Con una tasa ligeramente inferior (111.19) Caracas ocupó el segundo lugar y con una tasa de 106.63 Acapulco tuvo la tercera posición.
Cinco de las 10 ciudades más violentas, entre las 50 que incluyen el ranking, son mexicanas: además de las ya mencionadas figuran La Paz, Tijuana y Victoria.
Más allá de las ciudades que ingresaron, reingresaron o salieron del ranking, los hechos de mayor importancia cualitativa en la más reciente edición del estudio periódico “Ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo”, son tres:
1. La pronunciada y rápida disminución de los homicidios en las ciudades de Honduras
En 2016 en San Pedro Sula se registró una tasa de 112.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2017 fue de 51.18: una baja del 54.34% en tan sólo un año. De este modo la urbe pasó de la tercera posición en el ranking en 2016 a la 26 en el de 2017 (y ocupó el primer lugar mundial en los años 2011 a 2014).
En 2016 en el Distrito Central se registró una tasa de 85.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, pero en 2017 fue de 48.00: una baja del 43.59% en tan sólo un año. Con ello pasó de la posición cuarta en el ranking de 2016 a la 35 en 2017.
Estas reducciones extraordinarias no ocurrieron por casualidad, sino que son el resultado de un encomiable esfuerzo del gobierno de Honduras por erradicar en forma sistemática a células de grupos criminales, reducir la impunidad y actuar contra los delitos, distintos a los homicidios, que cometen las pandillas, así como poner orden en las prisiones.
2. El incremento de la violencia en urbes de México
En el sentido contrario a lo sucedido en ciudades de Honduras, en la brasileña Fortaleza la tasa de homicidios pasó de 44.98 en 2016 a 83.48 en 2017, un incremento del 85.59% en tan sólo un año.
Pero el disparo de la violencia homicida de Fortaleza palidece frente al habido en Los Cabos: pasó de 61 homicidios en 2016 a 365 en 2017, casi un 500% más en un año.
La violencia ha repuntado en México. En 2015 cinco ciudades mexicanas se incluyeron en el ranking; en 2017 fueron 12, la misma cifra de 2011. Ciertamente en 2017 las ciudades mexicanas estuvieron muy lejos de la tasa de casi 300 homicidios por cada 100 mil habitantes que alcanzó Juárez en 2010, pero el incremento de la violencia es innegable.
Y ante la pregunta de por qué ha sucedido esto la respuesta es que se ha hecho lo contrario que en Honduras: no hay una acción para la erradicación sistemática de las milicias privadas de los grupos criminales y se ha permitido que la impunidad llegue a los peores niveles jamás registrados.
3. La creciente dificultad para reconocer la magnitud de la violencia homicida en Venezuela, además del fenómeno demográfico que está sufriendo ese país
Desde años anteriores, pero sobre todo en 2017, nos enfrentamos a un nuevo fenómeno que expresa la muy grave crisis que en todos los órdenes que enfrenta Venezuela: la creciente incapacidad de contar a sus muertos.
Ante datos oficiales, la información de la prensa sobre el tema en 2017 fue mucho más escasa que en años anteriores, menos periódica y menos específica por lo que hace a la incidencia en las ciudades. Por ello salieron del ranking dos ciudades de Venezuela, sin que tengamos la certeza de que no deberían figurar.
Por otro lado Venezuela está enfrentando un acelerado proceso de despoblamiento. Cuatro millones de sus habitantes han abandonado el país, más de la mitad de ellos en los últimos tres años. Como resultado las estimaciones oficiales de población no son reales, ni tampoco las tasas de homicidios basadas en ellas, sino más altas.
Otras novedades que presenta el ranking 2017 son:
Incluidas en el ranking de 2016, salieron del de 2017 seis ciudades: Cuiabá (Brasil), Curitiba (Brasil), São Luís (Brasil), Armenia (Colombia), Cumaná (Venezuela) y Gran Barcelona (Venezuela).
De estas, las dos últimas salieron porque no hay datos para calcular las tasas, no porque exista certeza de que las tasas de homicidios hayan bajado lo suficiente como para ya no figurar en el ranking.
Las cuatro restantes ciudades tuvieron tasas inferiores a la de Cúcuta, Colombia (34.78 homicidios por cada 100 mil habitantes) que ocupó el lugar 50.
Al ranking ingresaron las ciudades de Los Cabos (México), por primera vez; La Paz (México), por primera vez; Tepic (México), la cual reingresa; San Juan (Puerto Rico), la cual reingresa; Porto Alegre (Brasil), un reingreso y Campina Grande (Brasil), que también es un reingreso.
De las 50 ciudades del ranking 17 se ubican en Brasil, 12 en México, 5 en Venezuela, 4 en Estados Unidos, 3 en Colombia, 3 en Sudáfrica, y 2 en Honduras. Hay una ciudad de El Salvador, Guatemala, Puerto Rico y Jamaica. La abrumadora mayoría de las 50 ciudades más violentas del mundo se ubican en América Latina (42 urbes).
En las 50 ciudades la tasa promedio fue de 59.17 (41,430 homicidios dolosos entre 70,016,008 habitantes). Pero sólo las primeras 16 ciudades superaron ese promedio.