Pueblo, palabra que ha sido explotada también en el discurso demagógico, tratando de callar la voz de quienes pretendemos conformarlo; el pueblo no nace, se hace, no somos pueblo hasta que nos reconocemos como dueños de nuestro destino y transformación. Entonces el pueblo no son sólo los más vulnerables, son todos los sectores insatisfechos con un régimen, capaces de gestar movimientos que hagan valer nuestra voz.
La cultura como bálsamo social, es representante de las mentes creativas y de gran talento, que a través de las artes plásticas, gráficas, la danza, el teatro, la música y el canto, reconfortan y fortalecen el espíritu de quienes contemplan su belleza.
A continuación les presentamos la primera entrega de una serie de materiales que están realizados con las voces de quienes tenemos algo que decir y la siguiente semana habrá una segunda parte.
Fuente: Taxi vigia