El presidente Donald Trump dice que su decreto que prohíbe nueva inmigración a Estados Unidos será solo a las personas que buscan green cards o tarjetas verdes, las tarjetas de residencia permanente, durará 60 días y no afectará a los trabajadores que ingresen al país de manera temporal.
Explicando detalles de la medida por primera vez desde que tuiteó el lunes por la noche que “suspendería temporalmente la inmigración a Estados Unidos“, Trump anunció algo menos que un alto total en la inmigración.
En cambio, dijo que la disposición equivaldría a una pausa de 60 días solo para las personas que buscan el estatus de residente permanente en Estados Unidos.
Dijo que revisaría la orden ejecutiva al final de ese período y decidiría si debía renovarse. No dijo cuándo lo firmaría.
Trump enfatizó los efectos económicos de la orden, indicando que “protegería a los trabajadores estadounidenses”.
Un funcionario de la administración con conocimiento del proceso le dijo a CNN que el decreto del presidente Trump solo aborda las tarjetas verdes porque la parte de la visa de trabajo es más complicada y necesita más tiempo para resolverla, especialmente dado que muchos de los que actualmente están en Estados Unidos con visas de trabajo están trabajando en cosas relacionadas con la pandemia, desde trabajadores en plantas de procesamiento de alimentos hasta trabajadores de la salud.
Esta fuente dijo que, aunque en términos prácticos las operaciones de rutina relacionadas con las tarjetas verdes se cierran ahora de todos modos, eventualmente volverá a la normalidad en ausencia de una nueva política.
La fuente dijo que el pedido de 60 días incluye una opción para extender si es necesario.
El primer borrador del decreto fue a abogados para su revisión la semana pasada. Además de Stephen Miller, Ken Cuccinelli ha sido un gran defensor interno de hacer esto.
Con información de Kevin Liptak
