Ciudadanos por la transparencia?

La transparencia no es otra cosa que la rendición de cuentas claras de los organismos políticos y burocráticos del Estado. Tambien es una herramienta que permite evaluar el desempeño de un gobierno para el cumplimiento de sus atribuciones. En 2002, el Congreso de la Unión, aprobó por unanimidad la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, esto con la finalidad de hacer visibles las actividades del gobierno federal y sus funcionarios, así como permitir al ciudadano acceder a la información vinculada con sus autoridades, esta ley fue modificada en 2007 y en 2014 con la implementación la una Ley General de Transparencia, para este 2025, el INAI(Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información) desapareció, dejando al gobierno federal 4 mil millones de pesos a su disposición.

En nuestro estado contamos con la Secretaría Ejecutiva del Sistema Anticorrupción (SESAEQROO) que mide los avances en la lucha contra la corrupción y que, según el INEGI, en 2024, el 83.6 % de la población dijo estar satisfecha con los trámites que realizaron personalmente en diversas dependencias, o sea, que se considera tremendo triunfo, que realices un pago en ventanilla y recibas un recibo. Como la justicia, la transparencia tambien es selectiva y en esta dependencia, la secretaria técnica, AlmaArroyo Angulo, no cuenta con los requisitos ni con la experiencia que marca la propia Ley del Sistema Anticorrupción del Estado de Quintana Roo, y resultaría irónico que, por este detalle, algún ciudadano solicitara información a la propia secretaria. Esta institución ha sido omisa, por ejemplo, con el ayuntamiento de Bacalar, donde se construye y se devasta sin licencias de construcción, y en donde están involucrados, desde el presidente municipal, José Alfredo Contreras, su cabildo, así como diversas direcciones municipales, o el caso del ayuntamiento de Felipe Carrillo Puerto, en donde su presidenta municipal, Mary Hernández, ha sido expuesta en diversos medios, por el despilfarro de recursos de ese ayuntamiento en fiestas y camionetas de lujo, entre muchos otros. Esto no es nuevo, la “transparencia” de este estado, ha tolerado en otros momentos, los viajes del exgobernador Roberto BorgeAngulo, que se clasificaron como “información reservada”, o el silencio cómplice del tambien exgobernador, Carlos Joaquín González, con el negocio millonario que armó “el venezolano” con las llamadas “carpas COVID”, y que es investigado en otros países, pero en México y en Quintana Roo goza de total impunidad.

La transparencia también puede generar ganancias, no sólo económicas, y lo saben quiénes haciéndose pasar por ciudadanos comprometidos por la transparencia, han hechosu nicho de manipulación y protagonismo. No buscaninformación, porque si lo hacen lo que encontrarán no será nada “nice” como les gusta, ni tendrá brillitos, y lo último que quieren es hacer un esfuerzo sin flashes, o ya estarían solicitando información sobre la obra que realiza la SEDENA (Secretaria de Defensa Nacional) en la zona federal de la Laguna de Bacalar, pero ese es un trabajo serio y tendrá que hacerlo gente seria, el ex gobernador Carlos Joaquín González les apapachó bien, y estos, se filtraron como agua en la administración actual. Estorban y dañan la colectividad ciudadana, se creen dueños de la transparencia,desincentivan a la ciudadanía verdaderamente preparada e interesada en aportar su conocimiento y esfuerzo en aras deun bien común.

La participación ciudadana es relevante, permite la vigilancia en el manejo del dinero público. No olvidemos que el gobierno no genera dinero, sólo administra el nuestro, así que la transparencia permite un manejo claro de este. Las leyes de acceso a la información fueron luchas de ciudadanos en un proceso de democratización, que permitieron exponer los malos manejos en diversas administraciones del país. Las políticas públicas se enriquecen cuando el ciudadano se interesa, opina y difiere.

Los buenos ciudadanos buscan la participación de todos en la sociedad, los testaferros de la transparencia pretenden la concentración de las decisiones sólo en su coto de poder. La función de la transparencia como componente del estado es evitar la mentira lícita, evitar la restricción de su prácticapara una verdadera justicia social. Si los verdaderos colectivos ciudadanos que se esfuerzan por ser convidados a la toma de decisiones siguen siendo ignorados, el poder político y su ejercicio no tendrán freno.

Detrás de la cortina de apariencias está la verdad, ruda ycruda, y entre las mentiras tambien así, las verdades de la política se reservan para quienes puedan trascender la ignorancia del pueblo, pero a pesar del discurso, la transparencia se jerarquiza.