La OMS (Organización Mundial de la Salud) considera que una de cada tres personas en el mundo carece del suficiente líquido para satisfacer sus necesidades diarias. La elevada densidad poblacional en México y la falta de infraestructura adecuada para su distribución, ha hecho que el agua potable sea inaccesible y cara para muchos mexicanos. La obligatoriedad de los países a proveerla de manera igualitaria y basta, quedó aprobada en la resolución 64/292 “El derecho humano al agua y el saneamiento” por la Asamblea General de la Organización de la Naciones Unidas, el 28 de julio del 2010.
Si bien existe una gran cantidad de agua en el mundo, no toda es apta para consumohumano, por eso la importancia de la concientización de la población sobre el cuidado de este recurso natural. México cuenta con la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección del Medio Ambiente, la Ley General de Desarrollo Social, la Ley de Planeación, la Ley General de Desarrollo Sustentable, la Ley Federal para la Administración y Enajenación de Bienes y la Ley de Aguas Nacionales, sin embargo,ninguno de estos mecanismos jurídicos obliga al Estado a proporcionar agua potable a los ciudadanos, se deben entablar juicios de amparo o de garantías, y para las familias de escasos recursos, este gasto resulta imposible.
El desabasto del agua no sólo lo sufren las zonas rurales, cada vez es más frecuente en zonas urbanas, la dramática situación que sufre el norte del país está alcanzando niveles catastróficos. Otro factor preocupante sobre el agua en México es su mala calidad, la contaminación de los acuíferos ha ocasionado que la población recurra al consumo de agua embotellada. Según la Fundación Friedrich-Ebert-Stiftung, 12 millones de mexicanos no tiene acceso al agua potable y el 80% de los cuerpos de agua sufren contaminación por descargas industriales. El tratamiento y reúso de aguas residuales brinda una alternativa a este problema.
Nuestro país es el mayor consumidor de agua embotellada en el mundo, esta situación merma la economía y representa ya un severo daño al medioambiente por los desechos que se generan, un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) arrojó que el 81% de la población en el país consume agua embotellada, las empresas que concentran el mercado de esta agua en México son Danone, Coca Cola y Pepsi, con una ganancia de 66 mil millones de dólares al año, según la revista Fortune. Coca Cola consume agua de cada estado de la repúblicamexicana y extrae más de 133 mil millones de litros de nuestra agua al año para sus procesos de producción, en Quintana Roo la CONAGUA (Comisión Nacional del Agua), le permite extraer 3 mi millones de litros de agua. Esto demuestra como la CONAGUA no regula la extracción de aguas subterráneas ni la explotación de los títulos de concesión que otorga a estas empresas, Coca Cola Femsa pagó en 2018, 2 mil 600 pesos por cada una de sus concesiones, esto demuestra como el sector público privilegia al sector privado.
El año pasado la CONAGUA realizó una declaratoria de emergencia para este 2022,sobre la falta de agua en cuencas del país, y si por un lado el gobierno federal desincentiva el consumo de comida chatarra que producen estas compañías, por otro, permite que estas tengan un acceso ilimitado al agua que pertenece y falta a muchos mexicanos. El 22 de Octubre del 2020, en su programa matutino, el presidente López Obrador, agradeció al presidente Donald Trump su paciencia por el retraso en el incumplimiento del Tratado de Aguas (1944) y afirmó que Estados Unidos auxiliaría a México en caso de que “necesitáramos agua para consumo humano” y que “en caso de una sequía severa tambien nos van a auxiliar”, hoy eso no ha ocurrido.
La escases de agua afecta el desarrollo social y económico de un país, repercute en la salud, en el campo, los recursos del agua subterránea, su sobreexplotación y contaminación, debe replantearnos como ciudadanos su cuidado y a las autoridades, tomar mejores decisiones sobre su gestión.