- La ex diputada local; legisladora federal y candidata del PRI, deja botado al partido que le dió todas las oportunidades políticas y del servicio público.
Sin hacerlo abiertamente Arlet Molgora Glover opera a favor del partido verde ecologista para poder imponer en la dirigencia municipal de esa fuerza política a su incondicional Carlos Mario Vera.
Para las ocho de la noche de este miércoles se ha programado la toma de protesta del ex asistente personal de Molgora Glover, como dirigente del partido verde en Othón P. Blanco, en dónde se ha convocado a todas las presidentas de sección que desde el PRI la llevaron antaño a ocupar diversos cargos públicos apadrinada por Roberto Borge.
Son las mismas seccionales quienes han evidenciado la operación que, sin mucho éxito, la desleal funcionaria realiza para tratar de llevarse a la militancia que todavía comulga y tiene afectos para el partido tricolor.
La dirigencia estatal priísta hace esfuerzos significativos para sacar a flote al otrora poderosa fuerza política y llevar a buen puerto la candidatura de Leslie Hendricks y de los 15 aspirantes a diputados locales, sin embargo, este tipo de deslealtades no les ayuda.
Arlet Molgora ya olvidó todo lo que le dió el PRI y que en muchos casos dejo atrás a cuadros masculinos y se le privilegio como cuota de género o por el compadrazgo o amiguismo que profesaba a Roberto Borge.
Desde esa administración también obtuvo cargos que desempeño de manera poco clara y transparente, como cuando fue directora administrativa de sesa y se le vínculo a un fraude del cual tuvo que simular hasta robos de vales de gasolina, presuntamente para no tener que rendir cuentas claras de los recursos económicos que manejaba.
De esa posición también logro diversos beneficios, como las plazas negociadas con la actual administración de Carlos Joaquín y una de ellas la ocupa precisamente Carlos Mario Vera, a quien hoy logrará colocar en el partido verde, pretendiendo seguir mamando de la ubre pública.