A TIRO DE PIEDRA
Por Julian Santiesteban
La belleza del cosmos no procede sólo de una unidad en la variedad, sino también de la variedad en la unidad
Umberto Eco
Mara Lezama Espinosa solicitó este domingo su registro como candidata de la coalición Juntos Haremos Historia a la gubernatura de Quintana Roo, al Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo). Llegó a la cita acompañada de actores políticos, seguidores de la Cuarta Transformación Republicana y de su acérrima rival de los últimos cuatro años: la senadora Marybel Villegas Canché. La buena fortuna y el camino a la gubernatura no sólo se funda en quienes la acompañan en su esfuerzo, pues además se complementa con la aparente dilución de los proyectos de sus oponentes que, pudiendo competir en mejores circunstancias, perdieron la oportunidad de construir el andamiaje necesario para poder acercarse, por lo menos, a la popularidad que hasta ahora tienen Morena y el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Además de la alcaldesa –hasta ahora- de Benito Juárez, el viernes 18, a las nueve de la noche, solicitó su registro por Movimiento Auténtico Social (MAS), Nivardo Mena Villanueva; el sábado por la mañana lo hizo la abanderada del PAN-PRD, Laura Fernández Piña, y el domingo por la mañana, la aspirante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Leslie Hendricks Rubio. El martes 22, en el límite legal establecido, lo hará el que será candidato por Movimiento Ciudadano, José Luis Pech Várguez, quien por cierto anunció que este lunes 21 de febrero renunciará a su militancia a Morena, luego de lograr ser el abanderado de partido naranja, dejando en el camino las aspiraciones del actor Roberto Palazuelos Badeaux.
Lo cierto es que, la “pasarela” de aspirantes este fin de semana fue una reedición de lo que han sido en todos los procesos electorales que le han antecedido: quienes acudieron ante la autoridad electoral intentaron mostrar la mayor fortaleza posible, a partir de las personas que lograron convocar. En esa dinámica por cierto, los extremos son bastante alejados, pues al acto de Mara Lezama acudieron –según estimaciones de diferentes periodistas- entre tres y cinco mil personas, mientras que al de la futura candidata del tricolor, Leslie Hendricks Rubio, apenas llegó, si acaso, un centenar. Por cierto, nebuloso está el dato de Fernández Piña, pues su comunicado expresaba que llegaron unas tres mil personas, cuando estimaciones más sensatas calculaban apenas unas 600 –el papel aguanta todo-. Por lo menos el abanderado del MAS se esmeró en juntar algunos centenares de acompañantes.
Por cierto, es de destacarse que, además de la ruptura de Pech Várguez con el proyecto de la 4T, otro de los que buscó la candidatura por esa vía, Luis Alegre Salazar, no se sumó finalmente a Lezama Espinosa, pues por lo menos no llegó a la capital quintanarroense, y llamó también la atención que la ex diputada federal “guinda”, Mildred Ávila Vera, que fue aliada del que ahora será candidato del MC, se ha alejado del futuro candidato naranja, pues acudió a levantarle la mano a la que, por ahora, luce imbatible aspirante.
A partir de ahora, se terminó, o debiera terminarse, la confrontación interna. La competencia, si puede considerarse tal, será a partir de abril contra los aspirantes de los demás partidos. Por cierto, habría también que señalar que, a diferencia de los tres aspirantes que solicitaron registro este fin de semana, cuyos discursos estuvieron fundados en la descalificación, el de Lezama Espinosa retomó –también hay que decirlo- viejas promesas hechas a los sureños, como la dignificación de la capital quintanarroense, atender a los que “la vieja política olvidó”; y por cierto, “mató” un tema que le “habían echado a andar”, señalando que era intención de su proyecto cambiar la capital para llevarla a Cancún (vaya despropósito). Mara Lezama dejó en claro que Chetumal es y seguirá siendo la capital estatal.
Por último, con su discurso se arropó del morenismo, se enfundó en la enorme popularidad de “ya saben quién”, toda la estructura discursiva y las ideas centrales difundidas estuvieron alineadas a la 4T, puntualizando el origen, lo cual no debiera pasar desapercibido, pues sus contrincantes han mostrado que, el puntal de su promoción será el ataque de la candidata de Juntos Haremos Historia, señalándola de ser parte de la llamada “mafia verde”; por lo menos, en el día en que Mara tomó la capital, no les dio elementos para el golpeteo, ya veremos a partir de abril.
COMENTARIO MORBOSO
Sólo como acotación, de ninguna manera el escribiente pretende menospreciar los esfuerzos de los demás aspirantes, pero la estadística es indicativa. Ciertamente, la voluntad ciudadana puede dar sorpresas. Si el caso fuera, porque mayoritariamente se opta por un proyecto que no sea el de la 4T, legítimo será el triunfo, pero como ha indicado en esta colaboración el escribiente, las circunstancias y las preferencias, por ahora, están marcadas. Nada más, pero tampoco menos. Así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.