- El Puente Nichupté, la falacia que constará más de 4 mil millones de pesos
- En aras de la Movilidad Sustentable, el puente podría incrementar el número de automotores circulando desde y hacia la Zona Hotelera de Cancún
- El impacto de la construcción de columnas sobre el Complejo Lagunar Nichupté, un tema ignorado deliberadamente
- Otras opciones, medianamente sustentables, son además mucho más baratas; por ejemplo, el puente representa un recorrido de 8.4 kilómetros; la línea Uno del Cablebús en la CDMX, por ejemplo, mide 9.4 kilómetros, pero cuesta menos de la mitad y no representa un riesgo para el Complejo Lagunar
El Puente Lagunar Nichupté ha sido una insistencia de dos diferentes sexenios, y por lo menos tres distintas administraciones municipales; el motivo, la pretensión de que con él, habrá de solucionarse el problema de movilidad en la Zona Hotelera de Cancún (ZHC); primer falacia; pero también se asegura que representa una propuesta con un impacto ambiental marginal; segunda falacia y, “aún hay más”.
De atrás para adelante
Cuando los especialistas trabajan en planes, proyectos o programas que, obligadamente, incluyen el término “sustentable”, el orden de los factores sí es un sine qua non; por lo que, luego de plantear la problemática, el segundo fundamental e infaltable aspecto es, el estudio diagnóstico, para, a partir de allí, hacer las propuestas que mejor propicien soluciones sustentables.
En el caso de la movilidad en la Zona Hotelera de Cancún, lo que sí sabemos es que en “horas pico”, el tráfico vehicular es una pesadilla que, en un polo turístico resulta una contradicción nefasta, pero no nos han dicho exactamente qué cantidad de vehículos circulan por el Boulevard en días y horarios diversos.
El colmo de esta situación lo representa el tiempo de recorrido entre el hotel Panama Jack y el Party Center en horario de las 22:00 horas a las 2:00 o 3:00, debido justo a la frenética actividad en la zona de las discoteques y los bares.
Los hoteles más afectados, en todos los casos, son aquéllos que se encuentran del kilómetro 14 en adelante, a los cuales, se hace necesario llegar vía el distribuidor vial del Aeropuerto Internacional de Cancún, a fin de no padecer el tráfico que se genera, todos los días, tres veces al día, del kilómetro cero al diez o doce en diversos tramos.
La falaz solución en metros y kilómetros
El tema de los recorridos, por más que se hagan las costosas campañas de promoción, en matemáticas, dos más dos siempre serán cuatro; por ejemplo, si consideramos la distancia a recorrer desde el distribuidor vial Aeropuerto del Boulevard Luis Donaldo al kilómetro 14 del Boulevard Kukulcán, que es el punto que conectará el puente Nichupté, tendríamos que:
-Vía el Puente Nichupté haríamos un recorrido de 10.94 kilómetros a través de un boulevard Luis Donaldo Colosio desde el distribuidor del Aeropuerto, hasta el distribuidor de la avenida Bonampak, más los 8.4 kilómetros del puente, para un total de 19.34 kilómetros.
-Vía directa a través del Boulevard Kukulcán, es decir: distribuidor vial Aeropuerto, Punta Nizuc, kilómetro 14, se recorren 12 kilómetros.
-Vía el Boulevard Luis Donaldo Colosio-Kilómetro Cero-kilómetro 14, tendríamos un recorrido total de 13.99 kilómetros desde el distribuidor vial Aeropuerto al kilómetro Cero, más los 14 del Voulevard Kukulcán, para un total de 28 kilómetros.
Como podemos apreciar, el recorrido más corto, aún con el Puente Nichupté sigue siendo el que considera circular por el Boulevard Kukulcán directo del distribuidor.
La falacia sobre la solución a la carga vehicular
En la campaña publicitaria se asegura que uno de los problemas que se van a resolver será “el de movilidad que existe hoy por el congestionamiento de tráfico en las horas pico de la zona hotelera al centro urbano”.
Pero, si analizamos, resulta que los principales problemas que se generan en la Zona Hotelera son:
-Entre las 08:00 y las 10:00 horas desde el kilómetro Cero, hasta el kilómetro 4 aproximadamente.
-Al medio día en las inmediaciones del “Party Center”
-De las 16:00 a las 18:00, desde la playa Tortugas al kilómetro Cero.
-De las 18:00 a las 20:00 horas en el tramo de Plaza Kukulcán a Plaza La Isla; las inmediaciones del “Party Center” y del kilómetro 4 al Cero.
-De las 22:00 a las 0:00 horas, del hotel Panama Jack al Party Center.
No obstante, no existe un estudio diagnóstico que especifique el número de vehículos que circulan en el Boulevard Kukulcán en días y horarios específicos y mucho menos, el tipo de éstos, es decir, cuántos taxis; camiones de pasajeros turísticos, urbanos, de carga, o vehículos particulares, a fin de determinar si la solución a la problemática es la creación de una vía alterna como es el caso del Puente Nichupté, o si corresponde en todo caso a la circulación de vehículos del servicio público de pasajeros.
La falacia ambiental
La información institucional, la que repiten los medios de comunicación en forma de boletines de prensa, asegura que con la construcción del Puente Nichupté, se atiende “la vocación de sustentabilidad y cuidado al ambiente es uno de los pilares del proyecto al contemplar la última tecnología en su construcción así como un impacto en la reducción de la huella de carbono de la Ciudad de Cancún”.
Según la información oficial, la “reducción de la huella de carbono”, tendría que ver con la construcción de una ciclopista “la más larga de América Latina” con una longitud de 8.4 kilómetros.
Sin embargo, no determina la forma en que se logrará que la gente deje de usar vehículos automotores para usar una bicicleta; menos aún cuando la distancia es superior a 8 kilómetros sin puntos intermedios.
Con base en la información oficial, se determina que la construcción del puente considera un menor impacto ambiental, pero tampoco especifica el cómo.
No obstante, lo que sí se sabe es que el puente se ubicará por encima de manglares, los cuales podrían estar en riesgo debido al escurrimiento de grasas, aceites y gasolinas de vehículos en mal estado mecánico, además de basura que se arroje desde los mismos, independientemente del impacto directo a la batimetría y alteración de las corrientes acuáticas del complejo lagunar por la presencia de las columnas o pilotes incrustados en el suelo hídrico.
La alteración al ecosistema que costará más de $4 mil millones
Al final, la posibilidad de tener una nueva vía de acceso representará el aumento de vehículos en la Zona Hotelera, pues en principio, seguro que habrán líneas de transporte urbano que recorran esa nueva alternativa; sólo con ese hecho, es seguro un incremento, adicional a quienes elijan efectuar un paseo por la nueva vía.
Todo ello, tendrá un costo de 4 mil 455 millones de pesos en una inversión mixta que, para pagar la inversión privada, requerirá de una caseta de cobro; es decir, la construcción del puente representa un impacto directo a la economía del ciudadano local, o del turista quien terminará pagando a través del incremento directo al costo del transporte.
El discurso de la “Movilidad Sustentable” que se ignora
El término “Movilidad Sustentable” o “Ecomovilidad”, es un término que en tan sólo unos pocos años, pasó de estar restringido a especialistas, a insertarse en el lenguaje cotidiano de ciudadanos y medios de difusión; consecuencia del impacto que la paulatina saturación a la que se enfrentan las vías de comunicación de las grandes ciudades tiene en la calidad de vida, salud y economía.
La movilidad sustentable es un modelo de traslado saludable de bajo consumo de carbono que prioriza el elevar la calidad de vida urbana y el bienestar colectivo, así como la creación espacios públicos confortables que favorezcan la convivencia ciudadana.
Justo en ese sentido, es complicado determinar que un puente fuese una solución con perfil de Ecomovilidad, pero existen otras alternativas que, desde luego, no fueron tomadas en cuenta.
Movilidad Multimodal Personal (MMP)
La Movilidad Multimodal Personal (MMP) es un término relacionado y muy cercano al concepto de Smart City.
La movilidad multimodal personal podría ser descrita como la interconexión de los ciudadanos (mediante el uso de dispositivos móviles), vehículos, sistemas de transporte y la infraestructura que permite la creación y el intercambio de nuevos tipos de información. La Movilidad Multimodal personal incluye todos los modos de transporte y todas las opciones de transporte público.
La búsqueda de las ciudades comprometidas con la Movilidad Sustentable y la MMP, buscan que esos medios de transporte, además, generen el menor impacto al ambiente.
El Cablebús, ¿no sería una mejor propuesta?
Incluso para atravesar el Complejo Lagunar Nichupté, un teleférico o ‘Cablebús’ disminuiría considerablemente la huella de carbón, el número de vehículos en la ZHC y, por si fuera poco, el monto de la inversión.
Decidimos hacer una analogía entre el costo del Puente Nichupté y una eventual habilitación de un Cablebús. La comparación la hicimos con el costo de la Línea 1 del Cablebús en la CDMX que tiene una longitud total de 9.4 kilómetros y 5 estaciones, a diferencia de Cancún donde sólo habrían dos.
El costo de la Línea 1 fue de 2 mil 925 millones de pesos, a lo que habría que restar el costo de la construcción de tres estaciones intermedias.
Una propuesta más eficiente y sostenible
Es evidente que la problemática más fuerte respecto de la movilidad en la ZHC, es la cantidad de bases de taxis, de taxis que circulan, camiones del transporte público y turísticos y vehículos particulares que generan una emisión enorme de gases de efecto invernadero y la característica de Cayo que tiene la ZHC con una sola vialidad.
Por ello es que la solución a la movilidad apunta a una propuesta que pudiera conectar al Aeropuerto Internacional de Cancún con la Zona Hotelera de Cancún, el Centro de Cancún, Puerto Juárez, Playa del Niño, Punta Sam, Playa Mujeres y Costa Mujeres en un recorrido lineal ida y vuelta con un sistema eficiente y sostenible por ejemplo, un Cablebús o un Monorriel o un autobús acoplado tipo “Metrobús”.
Es evidente que los intereses económicos y políticos de los funcionarios públicos con los sindicatos taxistas, las empresas de transporte público y turístico, son el principal obstáculo para planear con criterio sustentable.
Fuente: Cambio 22