¿Por qué vacunar primero a un reo? ¿Por qué, por ejemplo, recibirá un criminal sentenciado una vacuna contra covid-19 antes que un médico, un dentista, una enfermera, una persona de la tercera edad que no ha cometido ningún delito?
Esas son dos preguntas que cientos de habitantes en Quintana Roo han lanzado en los últimos días, al darse a conocer que esta semana comenzó la vacunación entre criminales del Centro de Reinserción Social de Cozumel.
Cinco reos, para ser exactos, recibirán su primera dosis, como parte de una campaña que ha lanzado la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para convencer a gobiernos estatales de vacunar a internos en distintos penales del país, para evitar brotes en penales. Pero, como era de esperarse, la situación abrió el debate entre otros sectores de la población.
En las redes sociales el criterio de vacunación también dividió opiniones. “Y mientras, miles de empleados del sector salud sin vacunas. Miles” escribió Luis Muñoz; “Las vacunan primero que a los que sí pagan impuestos y se portan bien” dijo Gab Muffin; “¿Ellos tienen ese derecho? y uno que se mata trabajando, no voy alcanzar vacunas hasta el 2022” publicó David Alejandro.
Por otro lado, Mario Machuca, secretario general de la CROC que aglutina a trabajadores del sector turístico en Cancún indicó que primero se debió priorizar a todo el sector salud y, después, a los trabajadores de la industria turística, que sostiene económicamente a este estado.
“A mi punto de vista la estrategia no es mala pero tampoco es la más adecuada, ya que se debió priorizar primero a todo el sector salud, público y privado, y continuar por el sector económico tomando en cuenta a los meseros, camareros, chef y todos aquellos que salen día a día a buscar trabajo y se exponen al virus”, indicó. La misma postura tomó el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Cancún, Sergio León.
“Hay un protocolo específico de quienes deben de ser vacunados y está granizado entre el gobierno federal y la OMS, la directriz indica que todos los adultos mayores incluyendo a los recluidos deben de realizar la vacuna. Sin embargo, también creo que todas las personas involucradas en la salud sean o no de contacto directo, también deberían de ser considerados como prioridad” expresó.
De acuerdo con los Servicios Estatales de Salud (Sesa), en Quintana Roo se han registrado 2 mil 445 defunciones por covid-19. Aunque no hay una cifra disponible de cuántos corresponden a trabajadores del sector turístico, son una de las actividades productivas con una importante interacción hacia turistas nacionales y extranjeros de todo el mundo y que mucho de ellos han perdido la vida, lamentablemente al contagiarse por interactuar con visitantes en sus centros turísticos de trabajo. Por el otro lado, Marco Toh, presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Quintana Roo, indicó que es un tema para garantizar la salud de los reclusos.
“No tendría que haber ninguna discriminación”, reclamó. Lenin Amaro, presidente Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Riviera Maya fijó una postura a favor de los internos. “No hay que perder el sentido humano, sin importar que sean reos si son mayores de 60 años lo primero es lo primero y es la salud además de que así lo marca la estrategia nacional de vacunación, debemos considerar que al estar confinados en un centro penitenciario los hace doblemente vulnerables por ser mayores de 60 años y por estar encerrados todos en un mismo lugar”.
Otros de los sectores de la población que han solicitado ser parte del esquema nacional de vacunación son los profesores de los distintos niveles educativos para el regreso a clases. Sin embargo, las autoridades federales prevén la vacunación de docentes, cuando sus entidades federativas lleguen al semáforo verde.
Fuente: Milenio