El programa “Jóvenes Construyendo el Futuro” del Gobierno Federal no funciona como lo presume el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Una investigación periodística del diario Reforma mostró cómo se desvían recursos públicos, al menos en el estado de Nuevo León.
Hace unos días, el presidente viajó de Monterrey al municipio de Linares para presumir la efectividad del programa conocido también de apoyo a “ninis” (jóvenes que ni estudian ni trabajan).
Este programa otorga becas en efectivo a personas entre 18 y 29 años de edad, a quienes les da recursos durante un año para que aprendan un oficio; es uno de los más costosos del Gobierno Federal.
Sin embargo, en Nuevo León, Jóvenes Construyendo el Futuro ha beneficiado no sólo a “ninis”, sino que es una herramienta corruptible, sin controles, con la que particulares armaron redes para desviar recursos públicos.
AGANDALLÁNDOSE EL DINERO
La investigación de Reforma durante cinco meses descubrió dos redes -una en Linares y otra en el área metropolitana de Monterrey- encabezadas por un ex funcionario municipal y un aspirante de Morena a diputado federal por el Distrito 4 en San Nicolás, respectivamente, para inscribir por su cuenta a jóvenes en el programa y apoderarse de gran parte del dinero de sus becas.
En este tiempo se realizaron 140 entrevistas a beneficiarios que aparecen en el padrón de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STyPS), que encabeza Luisa María Alcalde, responsable de ejecutar el Programa.
El monto de la beca arrancó en 3 mil 600 pesos y para este año asciende a 4 mil 310 pesos.
Entre 2019 y 2020, se reporta que los apoyos beneficiaron a 1.5 millones de jóvenes, con un presupuesto que rondó los 50 mil millones de pesos, según datos oficiales de la STyPS.
Los testimonios y documentos obtenidos por Reforma revelaron que en Linares, Reyes Lucio Zurita, ex empleado de la Coordinación de Desarrollo Económico municipal en la actual gestión del panista Fernando Adame, tejió una red en contubernio con dueños de negocios locales para dar de alta a unos 100 jóvenes dentro del programa y así desviar los recursos federales.
MAL USO DE INFORMACIÓN
Lucio ofrece supuestos empleos a jóvenes para obtener sus datos personales y, sin su consentimiento, usa la información para inscribirlos en la plataforma de Jóvenes Construyendo el Futuro.
De acuerdo con jóvenes entrevistados por Reforma, el ex funcionario incluso les retiene las tarjetas bancarias en las que el Gobierno de la 4T les deposita el dinero de las becas cada mes.
Una estudiante de música, de 18 años -que accedió a dar su testimonio en video bajo la condición de anonimato-, relató que Lucio le ofreció trabajo tocando en un mercado y fiestas privadas por un pago de mil pesos mensuales.
Ella retuvo su tarjeta, pero Lucio la obligaba mediante llamadas y visitas a su domicilio a transferirle 2 mil 700 pesos mensuales a una cuenta.
DESCARADO ENGAÑO
En una segunda red, detectada por Reforma en el área metropolitana de Monterrey y que opera bajo un esquema diferente, el aspirante morenista a diputado federal Yahir Omar Guerrero Ríos engaña a estudiantes, a quienes promete un apoyo económico de mil 600 pesos al mes por acudir a talleres de superación personal impartidos en Ser 360, uno de sus negocios.
Guerrero y sus colaboradores armaron una red de engaños a universitarios entre 2019 y 2020, pese a que el programa es para “ninis” y no está diseñado para estudiantes.
Dyvanhi Patricia González García, de 21 años y alumna de la Facultad de Medicina, se enteró en 2019 de los cursos que ofrecía el morenista en redes sociales.
Le pidieron sus datos para registrarla, pero finalmente ella no aceptó.
Me dijo (un colaborador de Ser 360) que lo iba a hacer todo por mí, porque él hacía los trámites. Yo no sabía que había una plataforma (del programa) ni nada”, contó.
Según datos del padrón único de beneficiarios del programa, a la cuenta de Dyvanhi se realizaron depósitos por 7 mil 200 pesos, monto que ella nunca cobró.
Fuente: Jorge Castro Noriega