Una nueva compra realizada por personal de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), relacionada con la compra de alimento para perros y caballos, exhibe la “voracidad” de Daniel Zúñiga Esparza sub secretario de planeación y finanzas, de Edgar Sánchez Piña director general de administración y del propio titular de la mencionada secretaría Alberto Capella.
El polémico funcionario acusado de corrupto en estados como Tijuana y Morelos, realizó un contrato con la empresa COMERCIALIZADORA DE PRODUCTOS Y SERVICIOS M.S.T., S.A. DE C.V. bajo el contrato SSP/AD/ADQ/GC-001/2020 para la adquisición de Alimento Canino y Equino por un monto de 572 mil pesos.
Según documentos en nuestro poder, cada una de las 315 bolsas con un contenido de 20 kilogramos de alimento para perro se facturo en mil 339 pesos, es decir que cada kilogramo de “croquetas” tuvo un costo de 66.95 pesos.
En el mercado mexicano, existen diversas marcas de comida para perro con las mismas características y con un precio al público consumidor de 505 pesos, además de contener 25 kilogramos de producto, lo que significa que cada kilo tiene un costo 20 pesos.
Ciertamente existen “croquetas” de mejor calidad a las que se adquirieron y de las más caras en el mercado mexicano, las cuales tienen un costo de 708 pesos por bolsa con 21 kilogramos, es decir 33.71 pesos por kilo.
Como se puede observar la sobre facturación del alimento para perro se duplicó. En pocas palabras, el asalto fue abismal, este gasto de más de medio millón de pesos pudo haber costado la mitad.
En el caso del alimento para caballos, Alberto Capella y “sus forajidos” facturaron en 690 pesos cada una de las 88 bolsas de 40 kilos, es decir, cada kilogramo tuvo un costo de 17 pesos con 25 centavos.
Nuevamente investigamos en las tiendas especializadas en donde venden alimento para equinos, y nos llevamos la sorpresa de que cada bolsa de 40 kilos tiene un costo de 353 pesos, lo que significa que cada kilogramo de comida cuesta 8 pesos con 82 centavos.
La documentación y la comprobación de este robo es más que evidente, sin embargo, aunque parezca inaudito, el contralor estatal Rafael Del Pozo Dergal continua en su letargo, en su zona de confort.
La sobre facturación y las simulaciones fiscales en la Secretaría de Seguridad Pública, sin duda alguna es un hurto en despoblado y nadie puede detener al representante de la ley, quién todos los días asalta el presupuesto gubernamental en compañía de sus secuaces.
Fuente: GH Periodismo sin permiso