El mal estado de las unidades, la falta de recursos e insumos aunado a las medidas preventivas para evitar la propagación del COVID-19 ocasionó que la ausencia de paramédicos para atender el reporte de un adulto mayor que resbaló en su baño y posteriormente falleciera a consecuencia de traumatismo craneoencefálico.
Los primeros minutos de este lunes, el número de emergencias 911 recibió el reporte de un accidente al interior de un domicilio ubicado en la calle Francisco J. Mújica, entre Ramón Corona e Ignacio Manuel Altamirano.
El reporte estableció que una persona de 84 años de edad, identificado como Abundio, sufrió una caída en el baño y sufrió golpes en la cabeza.
Tras esperar por casi una hora y por la ausencia de una ambulancia, los familiares decidieron transportar al lesionado a bordo de un vehículo Chevy a la clínica del ISSSTE escoltados por elementos de la Policía Quintana Roo.
Al llegar a la clínica y ser valorado, el lesionado había muerto aparentemente por traumatismo craneoencefálico.
Trascendió que la ambulancia de la Unidad de Respuesta a Emergencias Médicas (UREM) opera sin insumos, mientras que la Cruz Roja solo tiene tres unidades de las cuales sólo una se encuentra en buenas condiciones aunque solamente funciona los fines de semana.
Las otras dos ambulancias presentan desperfectos que limitan su operación.
A través de redes sociales ciudadanos manifestaron su inconformidad por la falta de atención de las instituciones como la UREM y la Cruz Roja además que por la pandemia del covid no han respondido las llamadas de emergencia para evitar ser contagiados.
Fuente: Noticaribe