La embajada de Estados Unidos en México informó hoy que se hallaron explosivos sin detonar en un barco de turistas en el Caribe mexicano, por lo que emitió una alerta de viaje para que sus ciudadanos eviten el uso de los transbordares.
“El 1 de marzo, artefactos explosivos sin detonar fueron encontrados por autoridades mexicanas en un transbordador turístico que opera entre Cozumel y Playa del Carmen“, señaló la embajada en su portal.
Destacó que este incidente se suma al del 21 de febrero cuando un artefacto explosivo detonó en un transbordador turístico en Playa del Carmen, dejando un saldo de numerosos heridos, entre ellos algunos estadounidenses que fueron dados de alta el mismo día.
La embajada puntualizó que los empleados del Gobierno de su país “tienen prohibido utilizar todos los transbordadores turísticos en esta ruta hasta nuevo aviso” y que las autoridades mexicanas ya investigan los hechos.
La Secretaría de Marina recibió un aviso sobre estos artefactos explosivos en el barco Caribe III, el cual estaba fondeado a unos 500 metros del muelle en la isla de Cozumel, de acuerdo con fuentes del Gobierno mexicano que pidieron no ser identificadas.
Una embarcación de la Marina se acercó a la embarcación para verificar el reporte, sin que al momento las autoridades federales se hayan pronunciado oficialmente al respecto.
Las instalaciones del muelle de Cozumel continuaron sus operaciones bajo la estricta vigilancia de la Marina y la Policía Federal.
A su vez, el Gobierno estatal de Quintana Roo emitió un comunicado en que señaló que “un informe preliminar de la Administración Portuaria Integral del Estado dio a conocer que lo comentado en redes sociales relativo a la embarcación de Barcos Caribe, señalada como portadora de un supuesto artefacto explosivo, solo se usaba para transportar refacciones”.
La embarcación, añadió, se encontraba ubicada a 500 metros de la costa de Cozumel y tiene 10 meses sin operar, pues no cuenta con la concesión de navegación respectiva.
“La embarcación señalada de Barcos Caribe no representó, ni representa, ningún peligro para los pasajeros cotidianos de Cozumel ni para los turistas que visitan nuestros destinos turísticos”, acotó.