El gobierno guatemalteco se declaró optimista sobre la solución del añejo diferendo territorial, insular y marítimo con Belice, con base en una consulta popular prevista el 15 de abril próximo que decidirá la pertinencia o no de llevar el caso a la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
La canciller Sandra Jovel dijo que nunca antes, en más de 150 años de disputa entre ambos países limítrofes, se está tan cerca de llegar a una solución pacífica y definitiva del diferendo territorial.
Jovel encabezó la semana pasada un acto para inaugurar la campaña del gobierno a favor de la participación ciudadana en la consulta popular sobre Belice, programada para el 15 de abrilpróximo, mientras que la excolonia británica aún tiene pendiente fijar fecha para su respectiva votación.
Autostiene que únicamente está pendiente definir o marcar algunos puntos de la frontera común, mientras que Guatemala reclama más de la mitad del territorio beliceño, que consideran usurpado por los británicos.
“En 1783 y 1786 la corona española dio permiso a los ingleses para que cortaran palo de tinte en una pequeña porción de tierra en la parte norte del territorio que hoy ocupa Belice”, de acuerdo con el recuento histórico oficial de Guatemala.
“Para 1821 cuando Guatemala se independizó de España, los ingleses ya habían usurpado todo el territorio” que en la actualidad ocupa Belice, según la cancillería guatemalteca.
Aclaró que el Reino Unido otorgó de manera unilateral la independencia a Belice en 1981, que Guatemala aceptó en 1991, pero el gobierno guatemalteco “no reconoció el territorio que ocupa ese país (Belice)”, pues “fue usurpado por Inglaterra”.